¡No entres en pánico! Guía para sobrevivir a un sismo
El 19 de septiembre es una fecha que ha quedado grabada en la memoria colectiva de México. Los terremotos de 1985 y 2017 demostraron la fuerza de la naturaleza y la importancia de la prevención.
Ante un sismo, el miedo puede ser abrumador, pero la información y la preparación son nuestras mejores aliadas. A continuación, te ofrecemos una guía esencial para que tú y tu familia estén seguras, basada en las recomendaciones de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC).
Antes del sismo: ¡La preparación es poder!
Plan familiar de Protección Civil: Este es tu mapa de seguridad. La CNPC aconseja que en familia identifiquen los lugares seguros en casa (muebles firmes, esquinas de muros, columnas) y las zonas de riesgo (ventanas, espejos, objetos pesados). Además, deben establecer puntos de encuentro, tanto dentro como fuera de su hogar, en caso de que queden separadas.
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Mochila de emergencia: un kit de supervivencia indispensable. Debe contener:
- Documentos importantes (actas de nacimiento, identificaciones).
- Linterna y pilas de repuesto.
- Radio de pilas (para mantenerse informadas).
- Botiquín de primeros auxilios.
- Agua embotellada y alimentos no perecederos (barras energéticas, galletas).
- Silbato (para solicitar ayuda).
- Copias de llaves del hogar.
Durante el sismo: ¡Calma y acción!
Mantente a salvo: si estás en el interior, no corras. Aléjate de ventanas, cristales y objetos que puedan caer. Agáchate, cúbrete y sujétate.
Si es posible, métete debajo de una mesa resistente o colócate en el marco de una puerta.
Si estás en la calle, busca un espacio abierto, lejos de edificios, postes y cables. Nunca uses elevadores.
Después del sismo: ¡Evalúa y actúa!
- Verifica la seguridad: antes de moverte, revisa si hay daños estructurales, fugas de gas o cortocircuitos. No enciendas cerillos ni cigarros.
- Evacua con precaución: si es necesario abandonar el inmueble, hazlo con calma, usando las escaleras. No corras, no grites, no empujes.
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Recuerda que la educación sísmica es un proceso continuo. La prevención no es un lujo, es una necesidad que puede salvar vidas. Estar preparadas, informadas y conscientes nos permite enfrentar la adversidad con inteligencia y fortaleza.