Diana Flores: la mexicana que conquistó el flag football y ahora sueña con el Olimpo
La historia de Diana Flores es digna de un guion de cine. De recibir un balón de fútbol americano a los ocho años hasta brillar en un anuncio del Super Bowl y convertirse en embajadora mundial del flag football, la mariscal de campo mexicana ha demostrado que los sueños no tienen género ni fronteras.
Con dos medallas de oro en los Juegos Mundiales, un legado como capitana de la selección mexicana y el reconocimiento de la NFL, Flores no solo juega, sino que inspira. “El flag football nos sigue demostrando que no hay límites”, declara con convicción, recordando que su papel va más allá de las canchas: dejar un legado para las nuevas generaciones.
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Su rostro, transmitido a millones en televisión durante el Super Bowl LVII, junto a figuras como Billie Jean King y Mr. Beast, confirmó lo que ya era evidente: Flores es la cara del flag football en el mundo.
Pero el clímax de su carrera aún está por llegar. Con el ingreso de la disciplina a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 (LA28), Diana Flores ya visualiza el momento de escuchar el Himno Nacional en el podio. “Es un sueño hecho realidad, el más grande de cualquier atleta”, afirma.
Hoy, a sus 27 años, Diana no sólo representa al deporte mexicano en la escena internacional, también encarna una nueva narrativa: la de las mujeres que transforman el juego, dentro y fuera del campo.
