Natalia Escalera, la gimnasta mexicana que se niega a rendirse
Natalia Escalera, una de las grandes figuras de la gimnasia artística mexicana, protagonizó una de las escenas más emotivas de los Juegos Olímpicos de París 2024, al retirarse entre lágrimas tras competir lesionada, acompañada de su entrenador Pavel Oseguera.
La gimnasta originaria de Ensenada, Baja California, decidió salir al escenario olímpico a pesar de una rotura del ligamento plantar del pie izquierdo y un desgarro en el gemelo de la misma pierna.
Contra toda lógica médica, Escalera eligió no marcharse de París sin competir, enfrentando el dolor en la prueba de barras asimétricas, la de menor impacto para su condición.
“No he llegado hasta aquí para no estar en el escenario más grande del mundo”, escribió en sus redes sociales, ganándose la admiración del público y de la comunidad deportiva.
Aunque las lesiones la alejaban de la posibilidad de clasificar a una final, logró obtener la mejor puntuación entre las gimnastas mexicanas en este aparato.
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Luego de meses de recuperación, Escalera volvió a competir en abril de 2025, proclamándose campeona estatal de Baja California, y semanas después, en el Campeonato Nacional de Gimnasia Artística celebrado en Jalisco, logró completar su all-around por primera vez en más de un año, llevándose el título nacional.



“Por un momento dudé de mi capacidad, pero sigo mostrando quién soy esté donde esté”, afirmó tras su participación en el evento.
Aunque no competirá en el Campeonato Panamericano de Gimnasia Artística 2025, sí estará presente en la Believe Cup, organizada por su compañera Alexa Moreno, y ya se prepara para el Mundial de Gimnasia Artística 2025, a celebrarse en Yakarta, Indonesia.
Con la mira puesta en Los Ángeles 2028, Natalia Escalera no solo ha demostrado ser una atleta de alto rendimiento, sino un símbolo de resiliencia, entrega y pasión por su deporte. Su historia continúa, y con ella, la inspiración para nuevas generaciones de gimnastas mexicanas.